«Como revisora, una de mis tareas es unificar y armonizar las traducciones del equipo para crear unos diálogos cohesionados a partir del estupendo trabajo de los traductores. Desde el principio, nos dimos cuenta de que una de las partes más importantes del proyecto era el uso del humor, y trasladarlo del inglés al castellano sin que perdiera efecto y pudiera conectar con jugadores de todas las edades resultó algo vital. Al final, mi estrategia fue interiorizar el carácter y la forma de ser de los personajes y pensar: «¿Qué dirían en esta situación?» o «¿Cómo responderían a esto?», y tratar de plasmarlo en el texto. Las particularidades de cada uno, como la original forma de insultar de Rocket o un personaje al que le gustaba hablar con aliteración, resultaron un auténtico desafío, pero fue muy satisfactorio ver el resultado final del esfuerzo conjunto».

Ana Pérez Manglano (revisión)

«Participar en la localización al español de Marvel’s Guardians of the Galaxy fue algo que me hizo mucha ilusión porque les tengo mucho cariño a los personajes. Lo más divertido fue traducir las conversaciones entre los Guardianes. Se nota que le pusieron mucho empeño en captar la esencia de cada personaje, y trasladar esa diferencia de personalidades mediante las frases, las coletillas o el tono de cada uno hizo que el trabajo de localización fuera muy ameno.

En las intervenciones de Groot, por ejemplo, en el archivo original ponía entre paréntesis qué quería decir con cada «I am Groot», por lo que siempre se sabía qué conversación estaba teniendo con los demás Guardianes, lo cual ayudaba mucho a saber cómo traducirlas. Además, con lo enigmático que es Groot, me pareció muy entrañable saber qué decía en todo momento.

Siempre estaré muy agradecido de haber formado parte de este proyecto».

Elías Pastoriza Vila (traducción)

«El proceso de localización de un juego como Marvel’s Guardians of the Galaxy supuso todo un desafío a varios niveles. En primer lugar, porque pertenece a un universo tan amplio como el de Marvel, con miles de referencias en cientos de productos (cómics, series, películas…), lo que en ocasiones puede ser como buscar una aguja en un pajar. Además, las sagas de Marvel cuentan con millones de fans y eso exige estar a la altura.

Pero lo más complicado de todo, en mi opinión, fue lograr encajar la variedad de estilos de los diferentes personajes. Por ejemplo, el bueno de Drax habla de una forma mucho más solemne, mientras que Rocket o Star-Lord tienen un toque más canallita y no paran de soltar chistes y de hacer juegos de palabras. Y a esto hay que sumarle que Warlock utiliza aliteraciones y un modo de hablar de lo más característico. Por suerte, contábamos con unos compañeros estupendos, grandes profesionales y con una creatividad más que envidiable, lo que se puede apreciar en el producto final».

Carlos Enrique Velasco Vaamonde (traducción)

«La complicación principal de traducir Marvel’s Guardians of the Galaxy fue mantener el mismo tono humorístico del original, y sobre todo con la cantidad de texto que tiene el juego; ¡los personajes no callan ni debajo del agua! Sabíamos que la mayoría de actores de doblaje de las películas de Guardianes pondrían voz a los mismos personajes en el juego, así que mi truco fue releer cada frase que escribía con sus voces en la cabeza para saber si quedarían bien o no.

Luego llegó el personaje de Adam Warlock, que *spoiler* habla solo con aliteraciones. Aún recuerdo las tardes de sufrimiento, diccionario de sinónimos en mano, tratando de cuadrar frases enteras usando un único sonido y gritándole «¡TE ODIO!» a la pantalla del ordenador cual Anakin a Obi-Wan en la tercera película de Star Wars. A pesar de todo, fue uno de los desafíos de los que más he aprendido hasta ahora en mi carrera y creo que el resultado valió la pena».

María Garrido de Vega (traducción)

«En primer lugar, si algo conviene destacar para llevar este proyecto a buen puerto, fue el buen rollo entre los miembros del equipo. Basta con leer nuestras conversaciones en Skype para ver la retahíla de memes, chistes descartados y desvaríos fruto de los retos que nos proponía el juego, que no eran pocos (ma’e mía la tortura que fue investigar los títulos en español de los cómics originales). Recuerdo a la pobre María desahogándose porque le había tocado el grueso de ciertos diálogos en los que predominaba el uso de aliteraciones —sí, Adam Warlock, te estoy mirando a ti—, y nosotros, ante la impotencia de no poder ayudarla a traducir sus líneas porque bastante teníamos con lo nuestro, intentábamos animarla de formas que no desentonarían en absoluto con lo que ocurre en el interior de la Milano… o de un psiquiátrico, según se mire. Al final, no sé si la ayudamos o la dejamos peor, pero la intención estaba ahí.

También había otras dificultades ajenas a las que entrañaba el proyecto en sí, como el guion que correspondía a los banters (las conversaciones que transcurren mientras luchas o exploras, y que a su vez comprendían la mayor parte del guion general), que nos llegó ordenado por todas las intervenciones seguidas de un mismo personaje en lugar de llevar un orden de diálogo lógico, de modo que nos tocó tirar del Excel original para buscar la ID de la siguiente intervención e ir dándole sentido a todo. Si a eso le añadimos que debíamos repartirnos el trabajo entre varios, la mayoría de secuencias que traducíamos eran bastante inconexas. Hacíamos más saltos temporales en la trama que los Guardianes saltos interdimensionales. Menos mal que Ana estaba ahí para armar todo el rompecabezas en su excelente labor en la revisión, y la verdad es que, después de haberme pasado el juego, es hasta sorprendente lo bien hilvanado que ha quedado todo.

Pero el culmen de la gratificación nos llegó cuando un miembro del equipo nos comunicó que Chicote se había hecho eco en Twitter de que habíamos usado una frase suya en una de las líneas de Rocket —concretamente, la de Pim, pam, trucu, trucu—, y claro, nos vinimos arriba y nos pusimos a buscar en la TM quién optó por semejante perlita como traducción, pues no había nadie que se adjudicara su autoría. En efecto, la tradu resultó ser mía y yo ni me acordaba (con la de tonterías que digo y escribo a diario, como para hacerlo), pero ahí no quedó la cosa, pues unas dos o tres semanas después, por azares del destino, me encontré a Chicote por mi tierra, me acerqué a él y le comenté que yo fui el traductor que puso aquel Easter egg. A Alberto se le iluminó la cara y me pidió que me sacase una foto con él, cuando lo normal era que fuese al revés. Al final, puedo decir que me hice coleguita suyo y que este texto lo estoy escribiendo con su beneplácito».

Abel Funcia Santaella (traducción)

Finalistas en la categoría Mejor traducción de videojuego para consola, PC, web o dispositivo móvil

Marvel’s Guardians of the Galaxy

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