«Para la audiodescripción de la cuarta temporada de La casa de papel he investigado sobre instrumental médico y anatomía, armamento, cámaras acorazadas, fundición o arquitectura. Sin embargo, el gran trabajo ha consistido en profundizar en el perfil psicológico de cada personaje y en su estado de ánimo, en cada momento y en cada escena.
Tengo la suerte de tener amigos con discapacidad visual, así que antes de comenzar a audiodescribir una escena y cada vez que escribo un bocadillo, intento ponerme en su lugar y cierro los ojos para escuchar los efectos de sonido o la ausencia de ellos, la tensión o la alegría del momento. Imagino que estoy a su lado susurrándoles al oído lo que sucede en pantalla.
Porque hay tantos silencios con tantos matices que el reto consiste en transformarlos en emoción y hacer que las personas invidentes también vibren con una serie que ha emocionado a millones de personas en todo el mundo.
En cuanto a mi situación personal, me enteré de que me habían asignado el trabajo antes de terminar mi baja por maternidad. Era enero de 2020, me encontraba de vacaciones en Tenerife y mi hija solo tenía tres meses. Las noticias de esa extraña enfermedad que se contagiaba imparable por China inundaban los telediarios. Un par de días antes de volver a Burgos recibí un correo electrónico: «Hay nueva temporada de LCDP y te hemos asignado el trabajo». Y así fue como La casa de papel 4 pasó de ser el último encargo que hice antes del confinamiento para convertirse en la primera serie que vi antes de «la nueva normalidad».
Marta Aguilar Vicario
Finalista en la categoría Mejor guion de audiodescripción de obra para cine, DVD, TV o dispositivo móvil