Hermosa juventud

«Cuando subtitulé Hermosa juventud, inevitablemente relacioné la trama de la película con una persona muy cercana para mí, no solo porque se esté planteando emigrar al extranjero, a pesar de sus estudios, sino porque me recordaba mucho su día a día, su forma de hablar, sus temas de conversación… En definitiva, su forma de comunicarse.

De hecho, me gustaría incidir en la importancia del lenguaje en la película: la comunicación a través de las nuevas tecnologías, el argot juvenil, las conversaciones entre amigos de parque y botellón, los diálogos de pareja marcados por la desidia, el desánimo, pero, a su vez, por una pequeña esperanza que lucha por surgir para tener su protagonismo.

Se debía respetar al máximo la esencia del lenguaje en cada momento de la película, incluso cuando se debía adaptar el subtítulo para respetar una velocidad de lectura adecuada.»

Diana Labrador

Finalista en la categoría Mejor subtitulado para sordos

 

Hermosa juventud
Etiquetado en:        

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *