«Prácticamente desde que abrí aquel archivo de vídeo, supe que me enfrentaría a un gran reto si aceptaba encargarme de su traducción. Pero tenía que hacerlo. No podía dejar escapar Every Brilliant Thing.
Lo que se presentaba como un documental era, en realidad, una conmovedora obra teatral: la historia de un niño que decide enumerar las cosas maravillosas de la vida tras el primer intento de suicidio de su madre. Pero, sorprendentemente, el monólogo contendría también importantes dosis de humor. Sería un repaso a ese complejo viaje que es la vida. En este caso, la del protagonista. ¿El resultado? Un torbellino de emociones palpable tanto en el público presente —que interactúa con el actor— como en aquellos que, al otro lado de la pantalla, hemos sido testigos de todo. Y partícipes.
Ahí estaba el reto: Every Brilliant Thing es una obra catártica. No te cuenta una historia. Te hace partícipe de ella. Y, con la traducción, había que lograr lo mismo. Había un humor natural e ingenioso que adaptar, una intensidad que transmitir y una reflexión a la que invitar; y no iba a ser fácil con tal cantidad de registros condensados en 60 minutos de representación. Había que plasmar la inocencia de la infancia en el texto, hacer reír resolviendo juegos de palabras y chistes con el tono adecuado y, por encima de todo, captar la atención del espectador con el estilo empleado y llevarlo así a ahondar en sí mismo. Mi objetivo era intentar que quien viera el material traducido, más que entenderlo, sintiera lo mismo que había sentido yo al ver el original.
Cuando por fin pude ver el resultado final, comprobé una vez más el brillo y la vida que dan a las traducciones nuestros compañeros de producción, dirección y locución. Eso, junto a mi experiencia al completo con Every Brilliant Thing, me obliga a contar este encargo entre mis favoritos. En casos como este, uno nunca sabe por sí mismo si ha logrado su objetivo o no. Lo único que sé es que le puse todo mi cariño y empeño para que así fuera, y por eso me hace especial ilusión recibir vuestro reconocimiento en forma de nominación por este trabajo en concreto; por un proyecto mágico al que tuve la suerte de aplicar ese gran trasvase de ideas y sentimientos al que llamamos traducción.»
Daniel Cartagena
Finalista en la categoría Mejor traducción y adaptación para voces superpuestas en cine, TV, DVD o plataforma en línea
Felicidades, a mi me ha encantado