«Cuando a las 18.40 del lunes 10 de abril de 2017 (lo he buscado, no tengo tanta memoria) recibí un correo ofreciéndome una serie que adaptaba un libro, no sabía que iba a darme tantas alegrías como me las ha dado… aunque después de ver el primer episodio me dije: «Pero bueno, Javi, esto es un melocotonazo de miedo».
Como sabemos, la intertextualidad, la coherencia entre obras, es muy importante, así que como no podía ser de otro modo, me dispuse a hacerme con un ejemplar de El cuento de la criada, de Margaret Atwood. Problema: el libro llevaba años descatalogado. Sí, se iba a reeditar… pero no se publicaría hasta el mismo día que se estrenaba la serie, y claro, ya sería tarde.
Aunque conseguí hacerme con un ejemplar antiguo, no sabía si la reedición contaría con una traducción nueva que pudiera tener cambios, así que tras pedirle permiso al estudio, me puse en contacto con la editorial Salamandra, en concreto con Rafa Luna, quien tuvo el enorme detalle de obsequiarme con un ejemplar de galeradas (de un precioso color rojo criada) para poder mantener esa coherencia tan importante.
Quien haya leído la novela sabrá que cuenta con una abundancia de consignas, consignas cuya traducción original de Elsa Mateo (revisada en la reedición) respeté… salvo ese «under His eye», que sobre el papel quedó como «que su mirada te acompañe», pero que en doblaje quedaba largo a todas luces. Así pues, la adapté como «con su mirada» para mantener ese sentido de consigna religiosa bíblica que recuerda al «y con su espíritu» de las misas, pero que también transmite un sentido de amenaza y vigilancia implícita.
Además, la serie es rica en referencias bíblicas y ha inventado sus propias consignas nuevas, así que como imaginaréis, llevo un glosario donde anoto religiosamente (je) todas y cada una de las que salen para que no se me cuelen conforme avanza la serie.
De lo de las quejas de «¿y por qué la llaman Defred si en inglés es Offred?» ya hablaremos otro día. O no, que en la propia serie se explica. Vedla, que si se ha convertido en un icono, por algo será. No lo digo yo, sino la crítica y el público. Bueno, y yo también: no puedo negar que soy fan.
Nolite te bastardes carborundorum.»
Javier Pérez Alarcón (traducción)
«Lo cierto es que el trabajo en casa, solo ante los monitores, no es muy «de anécdotas», más allá del hecho de dejarse las cejas. Quizá os pueda comentar la dificultad para encajar en boca algunos de los latiguillos de la novela («con su mirada», «el Señor permita que madure», etc.) y que una vecina llegó a preguntarme (al oírme con esas cantinelas por el patio de luces) si estaba preparando alguna obra para una iglesia o secta.»
Roger Peña (adaptación)
Finalistas en la categoría Mejor traducción y adaptación para doblaje de obra estrenada en TV, DVD o plataforma en línea