«El año pasado tuve ocasión de traducir o revisar una decena de monólogos de humor para Netflix. Todos y cada uno fueron un reto. La traducción del humor no es fácil, especialmente cuando tienes que adaptar referencias culturales o te las tienes que ver con juegos de palabras que en inglés son desternillantes pero en castellano no funcionan. Es además un lenguaje muy cercano y coloquial, y aquí es aún más importante que el «aroma» a traducción sea imperceptible en tus subtítulos, o nadie se reirá. A pesar de la dificultad, es muy reconfortante traducir comedia porque siempre te echas unas buenas risas mientras trabajas. Admiro mucho el humor anglosajón. Suele ser de trazo fino, mordaz y disparar con bala. Con la excepción de uno de los humoristas que traduje, que me pareció zafio y desagradable, saben ser groseros si es necesario, pero sin caer en la chabacanería. De todos ellos, el que más gracia me hizo fue precisamente Rory Scovel. Yo creo que no es pecar de falta de profesionalidad decir que traducimos mejor aquello que nos gusta, aquel producto con el que conectamos o disfrutamos. No es un esfuerzo intencionado, ni es que nos importe menos la calidad de nuestro trabajo en los rollazos con los que a veces nos toca lidiar, sino que creo que todo nos sale mejor cuando estamos alegres. Esta nominación, que me ha hecho una ilusión enorme, creo que lo confirma.»
Jota Martínez Galiana
Finalista en la categoría Mejor subtitulación de obra estrenada en TV, DVD o plataforma en línea