Se licenció en Traducción e Interpretación en la Universidad Complutense de Madrid, tras lo cual obtuvo el título de traductora jurada. Actualmente, y desde hace diez años, trabaja como traductora y revisora para una empresa de localización de videojuegos, donde ha acumulado la mayor parte de su experiencia en traducción. Ha participado en proyectos muy conocidos, como las sagas Call of Duty y Destiny de Activision.
El trabajo en el sector de los videojuegos le ha permitido compaginar tres de sus grandes pasiones: la lectura, los idiomas y la aniquilación de hordas zombis.
Su trabajo en Dishonored 2 le ha valido resultar finalista en la categoría Mejor traducción de videojuego para consola, PC, web o dispositivo móvil en los V Premios ATRAE.